De la misma forma que en el lenguaje clásico los enunciados, con su sujeto y predicado, se usa para acotar pequeñas ideas o acciones, en la música asimismo hay pequeños factores para definir las ideas sonoras. Hablamos a los acompases y sus indicadores métricos.
Desde un criterio temporal, el factor básico que determina un concepto sonora es el “compás”. Por consiguiente, el compás es la unidad básica de medida del tiempo en la música. Para redactar la música se usan por norma general cinco líneas horizontales paralelas, es lo que se conoce como pentagrama. Pero a veces, si solo deseamos redactar un instrumento de percusión con sonido impreciso asimismo tenemos la posibilidad de emplear solo una línea horizontal.
Géneros de acompases
Tenemos la posibilidad de efectuar una clasificación de acompases según su construcción. Por una parte, disponemos los acompases sencillos, que son los que estuvimos enseñando hasta la actualidad y tienen la posibilidad de estar divididos por 2, tres o 4 pulsos.
No obstante, tenemos la posibilidad de ir mucho más allí y hallarnos con acompases en amalgama o complejos que tienen cinco, seis, siete o aun nueve o mucho más pulsos. Un excelente ejemplo de esta clase de acompases es la canción Money de Pink Floyd, que tiene siete pulsos. Otro ejemplo mucho más extremos lo podemos encontrar en las bulerías y en el flamenco generalmente. La bulería tiene 12 pulsos en conjunto, los que están conformados por 2 acompases de 3/4 y tres acompases de 2/2.
a) Compás binario
El compás binario es un compás de 2 tiempos en el que se forma un período en el que se alterna un pulso acentuado o fuerte con otro pulso no acentuado, átono o enclenque.
Compás fácil
Este es en el momento en que todos los pulsos o tiempo se puede dividir o en un caso así subdividir en 2 partes, en mitades, si estos se dividen en 2 y se marchan reuniendo uno con otro de 2 en 2 originarían lo que sería el 2/4 mejor popular como compás binario de subdivisión binaria, no obstante si estos pulsos se dividen en 2 y se reúnen de tres en tres terminaría siendo uno ¾ lo que vendría siendo un compás ternario de subdivisión binaria.
Dicen a los tiempos acompases compuestos en el momento en que todos los pulsos se puede dividir en tercios, por consiguiente, si estos se dividieran en tres y se agruparan de 2 en 2 tendrían como resultado el 6/8 que sería un compás binario de subdivisión ternaria, no obstante, si estos se dividen en tres y se reúnen de tres en tres originarían lo que sería el 9/8 el que sería un compás ternario de subdivisión ternaria.